Actualmente cualquier solución es buena para comenzar un camino, normalmente tendemos a
confiar en la astucia y la racionalidad que nos “caracteriza”, son las virtudes
que como ejemplares adultos de la llamada “especie humana” no permiten
evolucionar y seguir el camino. Todos tenemos que hacer decisiones difíciles
que nos marcan de por vida, y que a la siguiente vez, ya nos creemos expertos y
avispados como para no caer en la trampa.
Las ideas que decidimos retener
como guías para nuestro camino, más o
menos son valores para saber escoger qué dirección tomar cuando las cosas van
mal o bien. Son aquellas cosas que nos acompañan durante la educación y más allá.
Pero aquí no intento ser tan académica, existe muchísima gente que sabe el
triple sobre nuestro cerebro, y no soy nadie para hablar de esto. Solo quiero
hacer una reflexión,
Por 5 segundos mirar esta imagen
Reproducción de elaboración propia |
Ahora haz el siguiente ejercicio:
durante 10 segundos piensa en todas aquellas soluciones. Yo por ejemplo pensé en
dos trozos de pan con un tomate en medio, cualquier opción es válida. Este es
un ejercicio de soluciones creativas que vi en el programa BrainGames, entre los que les hicieron las pruebas (personas que tenían
de 20 a 40 años) no consiguieron nombrar más de 3 soluciones posibles a la
imagen, no había limites posibles para las respuestas.
No voy a explicar lo que
mencionaron en el video, porque solo quiero que reflexiones sobre lo que haces ¿Solo
3 o 4 soluciones posibles, cuando no tenías límites impuestos? Se volvió a
realizar la misma prueba en niñas (de 4 a 10 años), ellos consiguieron sacar
más de 5 respuestas totalmente descabelladas e originales. Al ser niños, no
tienen hay nada ni nadie quien les limite en su imaginación, cruelmente a veces
ellos mismos olvidan el poder de no tener nada para jugar.
Vuelve a intentarlo, piensa como
un niño, quizás cambie el resultado. En los días que corren hoy por hoy, más
vale ser niño perspicaz que olvidar la esencia y caer en la monotonía ¿No lo
crees así?